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| A finales del año pasado salió a la venta un material discográfico que lleva por nombre The Process Of Belief (Sum Records, 2001), que marca el regreso de la banda californiana de Punk conocida como Bad Religion a sus raíces comerciales. Esta banda fue uno de los grupos pioneros en trabajar en la completa independencia, ya que en sus inicios ante la negativa de ser firmados por las compañías establecidas, ellos decidieron crear su propio sello para editar sus primeros trabajos y la llamaron simplemente Epitaph. Tiempo después el resultado de las ventas haría que se fijaran en ellos compañías trasnacionales que al mismo tiempo marcaría la ruptura de la banda y la separación del sello. Ahora en los auspicios del milenio tres de nuestra historia, Bad Religion regresa a su compañía de discos que nació para difundir su música sin impurezas comerciales como a últimas fechas ha gestado la industria del disco. Este material cuenta con Greg Graffin, voz, Greg Hetson, guitarra, Brett Gurewitz, guitarra, Brian Baker, guitar, Jay Bentley, bajo, y Brooks Wackerman, batería; los tres primeros miembros fundadores del grupo y los restantes músicos que comparten la misma furia a los sistemas establecidos y su política injusta, quienes se han anexado a la banda con el paso del tiempo. Hay temas crudos muy en la Hardcore más puro como el abridor Supersonic, Evangeline o Can't Stop; del mismo modo encontramos temas más suaves que de alguna manera ponen de antemano la experiencia que ha dejado el tiempo en los integrantes de la banda, ahí tenemos a Prove It, Broken, Epiphany y The Defense. Este último aspecto se debe a que en los años recientes Bad Religion ha explotado mucho, debido al hecho que se ha influenciado por estructuras musicales no tan crudas como en sus primeros discos. de hecho la voz es totalmente clara acompañada con guitarras gemelas rápidas sin ser crudas entre armonías de bajo y batería que le dan fuerza a cada melodía. |
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